viernes, 4 de junio de 2010

Casella: “Alfonsín tiene pasado y futuro; ¿Cobos? Hasta hoy es el vicepresidente del Frente para la Victoria pero no termino de conocer sus ideas”


(2-6-10 Continta Norte)

Hasta la casa radical del Comité de Distrito de Vicente López se llegó Juan Manuel “Cachi” Casella en un gesto de respaldo a la candidatura de Ricardo Alfonsín y de Ricardo Ortiz en el plano local.

Pasadas las 19 hs. se llegó hasta la emblemática casa de Ricardo Gutiérrez al 1300 el histórico dirigente radical Juan Manuel Casella. Tiempo de descuento para las internas partidarias de la UCR y a solo 5 días de los comicios del 6, que transformarán en un mal recuerdo a la intervención que pesó sobre los boinas blancas de Vicente López, negándoles la legítima posibilidad de expresarse en las urnas democráticamente, se abre un nuevo período en el centenario partido.

El “Cachi” Casella – porque así lo bautizaron no pocos correligionarios a aquel radical que supo disputar la Gobernación allá por los 80 con los colores de la tradicional lista 3 que encabezaba Raúl Alfonsín - lucía distendido y reflexivo. Era tiempo del análisis meduloso y los proyectos e ideales porque al fin de cuentas, como dejó grabado a fuego el recordado ex presidente en muchos, hay que seguir ideas y no a los hombres. Casella ratificó su pertenencia a la lista que lleva como candidato a Miguel Bazze y cuya cara visible es el diputado Ricardo Alfonsín, candidato a delegado, pero además, hizo explícito su apoyo a la lista que en Vicente López encabeza Ricardo Ortiz.

En una rueda de prensa casi coloquial el bonaerense explicó que el gran desafío es el de recuperar al sistema político argentino. “Una democracia funciona adecuadamente cuando el sistema político articula bien y guarda una interrelación con la sociedad. La recuperación de la Unión Cívica Radical es central para recomponer el sistema político argentino y garantizar el buen funcionamiento de la democracia en nuestro país, debemos tener respuestas propias para los problemas actuales, no podemos seguir colgados de las barbas de Alem o de los gobiernos de Illia y Alfonsín”, deslizó al tiempo que puso el acento en un creciente problema de desigualdad que perfila la existencia de dos Argentinas.

“NO ES UNA INTERNA MÁS”

“El crecimiento de la marginalidad nos ha convertido en dos países enfrentados. Una parte de la sociedad tiene acceso a todos los servicios esenciales mientras que la otra, está acosada por la falta de salud, escuela, acceso a la vivienda y vive la exclusión. Así el futuro está gravemente comprometido – analizó- . La reconstrucción en el plano político, electoral y moral es fundamental para impulsar el crecimiento de la igualdad. Por eso esta no es una elección interna mas, promovemos la reconstrucción de la UCR, para restituir el sistema político y para que este funcione en procura de la igualdad social”, dijo.

Consultado sobre si no existía un problema de identidad cuando se habla de recuperar el sistema político y se ejerce el rol de oposición integrando el gobierno, Casella observó que por eso apoyaba la candidatura de Ricardo Alfonsín “porque es el mejor mensaje humano que el radicalismo le puede ofrecer a los radicales en este momento”.

“Tenemos presente la presencia de Cobos en el escenario político nacional, porque sería absurdo ignorarla – añadió- Pero…, ¿cuál es la característica que tiene Cobos? Es un hombre que por un episodio determinado, su voto en el Senado no positivo de la 125, logró instalarse con un amplio nivel de aceptación en la opinión pública, pero a los dirigentes políticos se los debe juzgar por su trayectoria y su pensamiento. Conozco la trayectoria de Cobos, hasta hoy es el vicepresidente del Frente para la Victoria, pero no termino de conocer sus ideas. No encuentro en Cobos respuestas concretas a los principales problemas de la Argentina. Quizás las tiene, lo que sucede es que no las ha expuesto aún. Por eso opto por otro candidato y creo que Ricardo Alfonsín cuenta con trayectoria, proyectos e ideas que lo hacen valioso para el radicalismo”

Fue entonces cuando rescató la necesidad de plantear un partido abierto, contendor, donde se imponga un necesario recambio generacional, una renovación que “no tire a los viejos por la ventana” sino que estos permitan la llegada de los nuevos dirigentes. “Debemos tener una actitud generosa y no pretender seguir manejando la superestructura y nada más. Correligionarios inteligentes, valiosos, con trayectoria, se han dejado apoderar por la idea de que lo que vale es la superestructura y en realidad, lo único que vale es el voto popular”, advirtió.


En esa inteligencia explicó que Antonio Cafiero, que fue ministro de Economía de Perón en el 53, llegó a ser la cara de la renovación justicialista del 85, dijo que ese proceso está aún pendiente en el radicalismo y que “la sociedad argentina está cansada de las peleas corporativas, esas que intuye que se ejecutan fundamentalmente para ganar espacios de poder personal o sectorial” pero en cambio “valora aquellas que se realizan por el bien común”.

Dijo no entender a quienes se alejaron en algún momento “porque no podían soportar el encierro que causaba la superestructura y hoy la apoyan” y cuestionó a Moreau y a Federico Storani por su apego al manejo del poder. Le dio poca trascendencia a los dichos de Storani en su carta abierta aparecida el pasado viernes, criticando a la lista de Ricardo Alfonsín. “La imputación del apoyo del kirchnerismo a nuestra lista es exótica, irreal, absurda –calificó- . Es un mal argumento de campaña y no vale la pena perder tiempo en responder”, indicó.

COBOS-GARCIA: trayectorias distintas


Un capítulo aparte merece la pregunta de un colega que intentó trazar un paralelismo entre la situación de Cobos con la del Intendente Enrique García, a su decir, un confeso “kirchnerista”.

”El intendente García tiene un pasado radical muy importante – ponderó Casella- Ejerce como Intendente desde 1987. Es un dirigente histórico de la UCR, Cobos no tiene la trayectoria del Japonés – evaluó en tren de comparaciones- . Se incorpora a la realidad política mucho más modernamente. Era un hombre dedicado a la enseñanza, un profesor universitario, decano de la Facultad de Ingeniería” que llega al radicalismo porque los mendocinos lo seducen para ser Gobernador, “no tiene una trayectoria demasiado larga. El Japonés García tomó decisiones con lo que se llamó la transversalidad, que fue un modelo que intentó impulsar Néstor Kirchner al comienzo de su gobierno. Seguramente García evaluó como otros equivocadamente el valor de ese proyecto pero hoy la realidad le dice que la transversalidad ha quedado arrumbada en el rincón de los recuerdos”.


“Hoy Néstor Kirchner es el presidente del Partido Justicialista y la transversalidad no existe”, puntualizó y le recordó al colega que tal vez esa decisión errónea que tomaron algunos radicales estaba íntimamente relacionada con una crisis institucional que dificultaba determinar cuál era el destino nacional. Recordó entonces al “que se vayan todos” como una fuerte expresión de rechazo a la dirigencia política argentina lo cual revelaba un estado de confusión nacional. “La confusión generó un espacio para el error”, expresó.

Con un criterio integrador, la convención de Mar del Plata de la UCR resolvió que se debía recibir a todos aquellos que se habían alejado del partido. “Pero también determinó buscar las alianzas con los partidos políticos afines; es decir la apertura de la UCR no es sólo para aquellos que quieran volver sino para quienes pertenezcan a otras corrientes políticas con el propósito de constituir una fuerza central que nos permita recuperar el sistema político argentino. En ese propósito no hay que trabajar para la digresión sino para la unión. Hoy se dibujan en el horizonte mediato tres propuestas electorales: la del gobierno y grupos que los puedan acompañar eventualmente; por otro lado, la centroderecha integrada por Macri, De Narváez y seguramente encabezada por Duhalde y -en tercer lugar- los sectores progresistas no peronistas donde están la UCR, el Gen, la Coalición Cívica y el Partido Socialista”, graficó.


En ese tono aperturista, feliz por los comicios que se avecinan, se desarrolló la presentación de la lista 27-20 que lleva a la joven Vanesa Jurado como candidata a secretaria general y al experimentado Ricardo Ortiz como presidente al Comité de distrito. Ortiz habló de un pluralismo partidario, abierto a todos los radicales, abogó por recuperar el rol de la UCR en todo contexto. “Nosotros somos circunstanciales lo único permanente es la sigla”, desgranó para confiar que cree profundamente en el proyecto de Ricardo Alfonsín.


INTERVENCION PERMANENTE, UN DAÑO PARA LA UCR


Al preguntarle por la posibilidad de que se restablezca la intervención al Comité local de darse un escenario que muestre una victoria de su lista en el orden local, pero una diferente a nivel provincial, algo con lo que se especuló en la presentación de la lista opositora, Ortiz observó que “es una visión muy chica de la actitud política local, carece de sentido práctico y en circunstancias reales que se diera esa alternativa resultaría negativa para el radicalismo de Vicente López. Plantear una estrategia en el marco de una intervención permanente para candidatearse es una repulsa activa a una actitud democrática. Aquí las reglas de juego son claras, hay una compulsa interna”, describió y vaticinó el triunfo de Ricardo Alfonsín para el domingo.

Con todo, reveló que en el orden local existen dificultades por los sitios de votación. “Quieren constreñir a 25 mil afiliados a que sufraguen en 4 lugares cuando históricamente en los últimos 30 años se vota en 8 escuelas: la N 3, la 6, la 15, la 7, la 2, la 16, la 18 y la 10 de Munro”, especificó.

Las cartas están echadas, más allá de que algunos cuestionen la desactualización de los padrones partidarios tras tantos años de intervención o los escasos lugares habilitados como cuarto oscuro, los radicales irán a las urnas en un proceso que aspira a poner de pie a la principal fuerza de la oposición. Enhorabuena por la democracia.